Todos tenemos personas en nuestras vidas a las que admiramos, que nos inspiran y que nos hacen querer convertirnos en mejores versiones de nosotros mismos. Sé que ciertamente lo hago. A estas personas las llamo “Guías de valores”, porque nos guían a actuar más en línea con nuestros valores. Si elegimos a nuestros guías con cuidado y nos conectamos con ellos conscientemente, pueden inspirarnos a tomar decisiones más inteligentes y a tomar mejores acciones. Y puedes empezar de inmediato.

Guía de cómo elegir sus valores

Piensa en una persona que de alguna manera te empodera y te eleva. Puede ser su amigo, su cónyuge o su maestro; un hermano, amante o entrenador; un compañero de trabajo, un miembro de la familia, un líder espiritual o incluso una figura pública. Realmente no importa a quién elijas, siempre que esta persona te conmueva y te anime profundamente. ¿Tienes a alguien en mente?

Lo más probable es que esta persona no lo eleve por las cosas que posee. No se trata de sus posesiones, ni de su apariencia, ni de sus títulos o premios. No son el núcleo de por qué esta persona te conmueve. En cambio, hay una razón más profunda y personal.

Esta persona te eleva porque aporta ciertas cualidades a sus acciones, y esas cualidades impactan en los demás. Me refiero a cualidades como la honestidad, la bondad, la paciencia, el coraje, la diversión, la integridad, la lealtad o el trabajo duro. Cualidades como su corazón cariñoso, su compasión o su dedicación a una visión.

Son estas cualidades las que aprecian tanto de esta persona, y son estas cualidades con las que probablemente desee conectarse. Por ejemplo, es posible que te preocupes por tu abuela, porque ella siempre estuvo a tu lado y te motivó en los contratiempos difíciles. Y así, dentro de tu conexión con la abuela, están las cualidades de cariño, amabilidad, lealtad y resistencia que te preocupan profundamente.

Cualquiera que sea la persona que elijas, hay cualidades en su ser y hacer que hacen que esta persona sea tan importante para ti. Y cuando se conecta con la razón por la que esta persona es importante para usted, puede incorporar mejor estas cualidades a su propia vida. En otras palabras, al pensar en tu abuela y por qué es importante para ti, te posicionas para llevar las cualidades de cariño, amabilidad, lealtad y resistencia a tu propia vida. Lo mismo ocurre con cualquier persona que haya elegido para usted.

Cuando piensas en esta persona, y por qué esta persona es tan importante, te empodera, te pones más en contacto con lo que realmente te importa en la vida. En otras palabras, te acercas mejor a tus propios valores. Y al conectarse con sus valores de esta manera, es más probable que usted mismo actúe de manera que mejore su vida.

Tenga en cuenta que la persona que ha elegido como guía no tiene por qué ser un faro perfecto e infalible. Las personas son complejas y nadie vive sus valores al máximo. Sin embargo, incluso ese conocimiento puede elevarlo, porque el dolor de la desconexión de valores puede recordarle lo que es importante y alentarlo a seguir mejorando para vivir una vida basada en valores.

Al final, importa menos qué guía elija, y más qué cualidades de acción su guía inspira dentro de usted aquí y ahora.

Entonces, ¿a quién eliges como guía? ¿Qué cualidades te evoca tu guía? ¿Y cómo vas a traer estas cualidades a tu propia vida?

Fuente: Steven C. Hayes


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