La especialista Marta Reta señala que es clave el trabajo con toda la familia para dar contención a los pequeños, que se los debe escuchar y acompañar
La especialista Marta Reta asegura que es clave el trabajo con toda la familia para la contención de los niños en el tratamiento de psicopatologías. Sostiene que se debe dedicar al niño tiempo para escucharlo, acompañarlo y jugar con él, sumado a un diálogo constante.
En diálogo con “Informar para la Salud”, la psicóloga y docente se refirió a la actualidad de los tratamientos, en relación al taller que dicta para el Colegio de Psicólogos: “Psicopatología infantil actual, el síntoma como oportunidad”.
“Tratamos de ver las dificultades de los niños como una oportunidad para trabajar con los niños y sus familias. Es necesario entender que las complicaciones vienen de la misma familia y del contexto social que vive”, sostuvo la especialista para el espacio de la Fundación Clínica de la Familia, y aseguró: “Hay vínculos transitorios, dificultades para conservar trabajos y tener estabilidad en lo afectivo y en lo laboral”.
– ¿Qué incidencia tienen estos fenómenos en la vida del niño?
– Todo esto incide en la vida del niño, porque si los padres sufren estas problemáticas están angustiados y se encuentran poco disponibles para escuchar a los pequeños, admitir que pueden sentirse tristes, solos, o que necesitan jugar. Por eso, todo lo que les pasa a los padres, influye en la vida de los chicos.
Reta explicó que si se hace el abordaje al niño de manera individual, “con una enfermedad particular y respondiendo con una medicación, se robotizan los afectos y los vínculos”. Indicó que lo bueno es “verlo como una totalidad, qué le pasa al papá o a la mamá que no pueden contenerlo en esta situación”.
Las patologías
– ¿Qué síntomas se observan en los niños para encontrar este tipo de psicopatologías?
– Si el chico no avanza en la escuela, o no tiene amigos, los padres se sienten impotentes y recurren al psicólogo para que pueda reacomodar la situación. Se debe tomar el síntoma como oportunidad para que el niño cambie y para que los padres puedan acompañar a los chicos.
– El trabajo del psicólogo en estos casos no es solamente con el niño sino que con toda la familia…
– Claro, se trabaja con los padres para que puedan ver qué importancia tienen las cuestiones afectivas en los niños, a pesar de que hoy en día dedican mucho tiempo a su trabajo. Sucede que papá y mamá tienen que trabajar mucho para sobrevivir, para pagar las comodidades para sus niños y con un solo ingreso no alcanza. También es clave que disfruten como pareja, porque se deja de lado la salida de los padres solos.
– ¿También se involucra a la familia ampliada y amigos en estos tratamientos?
– No en el trabajo terapéutico, pero sí se recomienda a los padres que no se aíslen, ni de los amigos ni de la familia ampliada. Son bienvenidos los abuelos, los tíos, los primos, porque también son modelos que los chicos toman. De este modo, el niño recibe el modelo de los padres y de los otros familiares, cada uno con sus características.
– ¿Cuáles son las máximas a tener en cuenta en el trabajo con los chicos?
– Lo más importante es recuperar los valores, el diálogo, el tiempo para jugar, para tener amigos, para salir. El adulto tiene que tener descargas de adulto, para que después estén disponibles para los niños. Los padres que nunca salen, que no se juntan con amigos, están sobrecargados y cuando el niño pide algo, ellos no tienen ganas de escucharlo. La relación se vuelve mecánica. Los niños perciben todo, si hay alegría de vivir lo notan, y del mismo modo, si los ve llorar lo sienten.
Es normal tener frustraciones, lo que no es normal es que no se hable de eso, dentro de la familia y también con los niños, porque actualmente se dan cuenta de todo. Es bueno hacerlo de manera filtrada, para que los chicos reciban explicaciones de un modo adecuado a cada niño.
Invitada: Marta Reta, Psicóloga. (M.P. 1.034. M.E 161)