Esta profesión ha logrado una importante expansión, reconocimiento y legalidad en estos últimos años.
El acompañamiento terapéutico es un dispositivo que amplio su territorio desde sus inicios en la década del 70 hasta la actualidad, con gran crecimiento. Este rol surge en nuestro país, en el ámbito de la psiquiatría, para acompañar en el proceso de externación, primeramente, a pacientes adictos y con psicosis con quienes otros modos de abordajes clínicos fracasaban. Siendo un grupo de estudiantes quienes lo ejercían sin ninguna formación específica. Debiendo esperar algunos años para que llegaran los primeros libros de la mano de Silvia Resnizky y Susana Kuras. De aquel tiempo a la actualidad ha habido un gran auge de esta profesión.
El acompañante terapéutico (AT) es un agente de salud que posibilita ampliar la intervención terapéutica y colaborar en la continuidad de los tratamientos, es un sostén confiable para el paciente y su familia. Su trabajo se enmarca dentro de un equipo interdisciplinario. El AT trabaja allí donde el paciente lo necesita, en su cotidianidad, donde se encuentre. Ante todo tiene una mirada clínica de la subjetividad del otro, trabaja con objetivos terapéuticos, lo cual define su rol sea cual fuere el ámbito donde se incluye.
Su intervención se indica en niños, adolescentes, adultos y ancianos; con desórdenes emocionales, de la conducta, psicosis y pacientes en situaciones críticas (depresiones, accidentes, enfermedades terminales, oncología, etc.) También en los regímenes de visitas controlados de los padres con sus hijos. Así mismo, un ámbito de gran auge viene siendo el escolar. Siendo allí necesario diferenciar este rol, del de las docentes integradoras quienes focalizan su trabajo en el proceso de aprendizaje.
No solo podemos referirnos a la expansión en sus territorios clínicos, sino también a su exportación, encontrándonos hoy con desempeños de importancia en Brasil, Paraguay, Uruguay, México y España.
Así “haciendo camino al andar” fue como surgió el reconocimiento primero clínico y social hasta llegar al actual reconocimiento legal y académico. Siendo difícil resumir este trayecto que implicó: la teorización en el campo del acompañamiento, la realización de jornadas, encuentros y congresos nacionales e internacionales, el reconocimiento de las obras sociales, así como la inclusión de este dispositivo en la ley de salud mental nacional y provincial sancionadas en el año 2010, y demás. La actualidad nos encuentra con la reciente Tecnicatura Universitaria en Acompañamiento Terapéutico perteneciente a la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba y la Ley Provincial de Regulación del Ejercicio Profesional del Acompañante Terapéutico, (Nº 10.393, sancionada el pasado 2 de noviembre). Estos hechos marcarán un nuevo devenir para esta disciplina. La ley provincial reconoce al acompañante terapéutico como un agente de salud incorporado a los equipos de salud dignificándolo y distinguiéndolo. Entendiendo que se han ampliado significativamente el camino que se viene haciendo, pudiendo abrir muchas más puertas.
La legisladora Liliana Montero explica: “es un punto de inflexión que a partir de la aprobación de esta ley, Córdoba tenga una normativa que regula el ejercicio de la profesión e incorpora a los Acompañantes Terapéuticos como profesionales del equipo de salud con matrícula y una equiparación académica que determina quién está capacitado para ejercer.»
Además, destacó que a partir del reconocimiento de esta ley, los Acompañantes Terapéuticos van a tener la posibilidad de incorporarse como prestadores del Apross (obra social de la provincia de Córdoba). Con esta acción, aspiran a que el resto de las obras sociales, también los incorpore. (Publicado en Medicina y salud 2016). La mencionada ley está a la espera de su reglamentación. Actualmente, en cuanto a la formación académica del AT cohabitan con la tecnicatura universitaria mencionada, cursos de formación dictados por diferentes centros formadores.
Así dados los hechos es que estos grandes avances dan lugar a un nuevo devenir en esta disciplina. Por ello, el próximo sábado 9 de septiembre se llevará a cabo el “VI Encuentro Provincial de Acompañamiento Terapéutico” en la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba, organizado por la Asociación de Acompañantes Terapéuticos de la provincia de Córdoba, allí los acompañantes se reunirán para seguir dándole expansión, reconocimiento y legalidad a esta profesión.
Lic. Carolina Montes. Psicóloga – M.P. 5059
Miembro de la Asociación de Acompañantes
Terapéuticos de la Pcia. de Cba.
Miembro de Fundación Clínica de la Familia
Nota publicada en diario Puntal el sábado 2 de septiembre de 2017.