El 21 de septiembre se conmemora el Día Internacional del Alzheimer, nos sumamos a las diferentes actividades celebradas en diversos países
La demencia es un síndrome que implica el deterioro de la memoria, el intelecto, el comportamiento y la capacidad para realizar actividades de la vida diaria. Aunque afecta principalmente a las personas mayores, no es una consecuencia normal del envejecimiento. En el mundo entero hay unos 47,5 millones de personas que padecen demencia, y cada año se registran 7,7 millones de nuevos casos, es una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores, y tiene un impacto físico, psicológico, social y económico en los cuidadores, las familias y la sociedad (OMS, 2015).
Las formas, o causas, de la demencia son múltiples y diversas. La enfermedad de Alzheimer (EA) es la forma más común de demencia: se calcula que representa entre un 60% y un 70% de los casos (OMS, 2015). En la revista científica Alzheimer & Dementia (2011), el National Institute on Aging and the Alzheimer’s Association work group concluyen que el proceso fisiopatológico en la EA comienza muchos años antes del diagnóstico de la misma, reconociendo una fase «pre-clínica» que proveería una oportunidad critica para una intervención terapéutica precoz. En este sentido, es necesario distinguir un olvido benigno, de uno patológico:
Olvidos benignos: son los habituales, en el cual la gente olvida datos poco importantes y conserva el recuerdo de la experiencia en sí misma. Un ejemplo sería no recordar instantáneamente el nombre de una persona a la que se está refiriendo, o dónde quedaron las llaves en casa.
Olvidos patológicos: aquí, la característica es que lo que se deja de recordar son cosas importantes, las personas que los padecen tienen un buen recuerdo de lo antiguo, pero olvidan situaciones concretas y aparece la reiteración y la desorientacion en lugares frecuentes. En la EA los primeros síntomas aparecen clínicamente como: la pérdida de objetos, la repetición de preguntas y el olvido de nombres propios.
También aparece dificultad para “encontrar las palabras” y cambios en la memoria visual, espacial y verbal. A diferencia del olvido benigno, en el olvido patológico el entorno familiar de la persona afectada, lo advierte y se preocupa.
¿Cuál es el lugar de la familia en el cuidado de la persona con Alzheimer?
Hay un dicho que dice que “el Alzheimer no es una enfermedad únicamente del paciente, sino mayormente de la familia”, debido quizás al hecho que el paciente pierde poco a poco sus facultades mentales y es la familia o sus cuidadores quienes se responsabilizan del cuidado y seguimiento del mismo. Existe en la literatura médica el llamado “síndrome del cuidador”, definido como un trastorno que se presenta en personas que desempeñan el rol de cuidador principal de una persona dependiente. Se caracteriza por el agotamiento físico y psíquico, con estrés continuado (no por una situación puntual), sino por una lucha diaria contra la enfermedad, y que puede agotar las reservas físicas y mentales del cuidador. Es por esta razón, se sugiere el abordaje de este tipo de patologías de manera integral, teniendo en cuenta principalmente el núcleo familiar, cuidando su salud, tanto como la del paciente.
¿Qué hacer para reducir el riesgo de padecer Alzheimer?
Un estudio realizado en la Universidad de Harvard, en la escuela de Medicina, destacó un listado de cinco pasos para reducir el riesgo de padecer este tipo de demencia:
• Mantenga un peso saludable y coma conscientemente. Siga un plan alimentario saludable para bajar de peso, en caso de necesitarlo, y aumente la actividad física.
• Cuide las «cifras de salud». Además de ver su peso y la cintura, pregunte a su médico si su colesterol, triglicéridos, presión arterial y azúcar en sangre están dentro de los rangos saludables.
• Haga ejercicio regularmente. Este simple paso hace grandes cosas para su cuerpo. La actividad física regular ayuda a controlar el peso, presión arterial, azúcar en sangre y colesterol. Trate de caminar entre 2 1/2 y 5 horas por semana a paso ligero. O pruebe un ejercicio vigoroso, como correr, si sólo cuenta con la mitad de ese tiempo.
• Genere desafíos cognitivos. Realice ejercicios de memoria, atención, lenguaje y concentración, en actividades diarias que demanden cambios a los hábitos cotidianos.
Invitado: Lic. Nicolás Fabbro, Psicólogo, M.P. 7968
Lic. Juan Pablo Zorza. Psicólogo. M.P. 4512
Miembro de Fundación Clínica de la Familia
Caminata Internacional por el Alzheimer.
El sábado 19 de septiembre a las 10:30 horas, en la estación de trenes El Andino, se realizarán actividades recreativas y de concientización. Se desarrollará junto a los participantes una caminata y se brindará información preventiva. Al igual que muchas ciudades de Argentina y Latinoamérica que conmemoran el día de lucha contra el Alzheimer. La iniciativa surge de la Fundación INECO de Bs. As. y en nuestra ciudad la impulsan el Centro de Rehabilitación Río Cuarto, el Centro Nueva Vida y la Fundación Clínica de la Familia.