Cada vez hay más estudios que analizan el tema. Investigaciones científicas determinaron que las técnicas de relajación logran atenuar el problema
El sentido común relaciona el estrés emocional con los episodios de hipertensión arterial. En rigor, había poca evidencia científica sobre esa conexión. Sin embargo, en la actualidad,la ciencia está abriendo nuevas líneas de investigación al respecto. Marcelo García, cardiólogo especialista*, explica cómo las emociones repecuten sobre este tipo de afección cardíaca.
-¿Cómo inciden los factores emocionales en la hipertensión?
-Habría que hacer un paréntesis para explicar que antes setenía un concepto de salud como ausenciade enfermedad. Y hoy se dice que lapersona está saludable cuando tiene un bienestar biológico, psicológico ysocial. La persona debe estar bien consigo misma y con su entorno social,además de no tener ningún síntoma que uno pueda ver como médico.
-Y, dentro de esto,¿dónde intervienen los factoresemocionales?
-Cada vez los estudios de hipertensión abarcan más cosas. Antes,tenían en cuenta sólo algunos factores de riesgo, pero hoy sabemos que haymuchos más. La investigación sobre salud mental e hipertensión va creciendo añoa año, sobre todo en los países europeos. Hubo un estudio muy grande enNoruega, donde se evaluaron técnicas de relajación para bajar la hipertensiónen aquellos pacientes que están al límite y por entrar en esta patología.Decidieron no hacer un tratamiento médico, sino terapia de relajación.Indudablemente, mostraron un beneficio importante, aunque todavía son pocoscasos como para aconsejarlo como técnica. Sin embargo, esto muestra cómo seestá abriendo el panorama en el estudio de esta enfermedad.
-El bienestar psicológico del paciente es importante…
-Esta es una enfermedad compleja, y en el 85 por ciento de los casosse desconoce la causa. Sin embargo, sí se conocen todos los factores queinfluyen, dónde debemos tener cuidado y cómo hay que cuidar al paciente. Lasalud mental es un pilar para el tratamiento: los médicos debemos evaluar quéactitud tiene el paciente hacia la vida, qué actitud tiene para consigo mismo,porque no acepta su enfermedad, todo se hace más difícil.
Es cierto: cuesta entender que se trata de una enfermedad de porvida, que necesita medicación y cuidados de por vida. Entonces, es importanteevaluar al paciente y llevarlo a comprender esto. Si en la entrevista médicasurge una conducta que nos haga sospechar, indudablemente necesitamos del apoyode psiquiatras, de psicólogos que nos ayuden a realizar un diagnóstico. Se havisto que la adhesión al tratamiento, la buena respuesta al tratamiento,depende de cómo está el paciente. Por eso es muy importante la salud mental eneste proceso.
-¿Por vía de qué mecanismos influye el factor emocional?
-Hay dos sistemas nerviosos que nos permiten funcionarbiológicamente. Uno es el sistema simpático y el otro es el sistemaparasimpático. El sistema nervioso simpático nos permite estar atentos para lahuida, para la lucha, para defendernos. El sistema parasimpático funciona al revés. Normalmente, vivimos enequilibrio. Cuando hay un desequilibrio a favor del sistema simpático, se hablade distrés o estrés. Por lo tanto, tenemos mayor frecuencia cardíaca, mayorpresión arterial y nuestro corazón sufre, está incómodo. Eso hace que aparezcanenfermedades, valores variables de presión arterial durante el día, quetengamos molestias y síntomas como dolores de cabeza, tensiones musculares,dolor en el pecho.
-¿Toda esta investigación se encuentra en una etapa inicial? ¿Sepuede cuantificar la incidencia del factor emocional en la hipertensión?
-En una maestría en hipertensión arterial que dicta la Universidadde Barcelona para médicos latinoamericanos, se incorporan los factorespsicológicos como algo muy importante para el tratamiento de la hipertensión.Todavía no se ha podido cuantificar, porque es algo muy subjetivo y es difícilde comparar. Sin embargo, sí se ha visto que los pacientes que no aceptan suenfermedad tienen una respuesta totalmente diferente al tratamiento. Estácambiando el punto de vista con el que se aborda la hipertensión; ya no es sólopor tener altos valores de presión arterial, sino que se entiende que se tratade un paciente desregulado por una serie de factores: sedentarismo, hábitosdañinos como el consumo de alcohol, cigarrillo o sal en exceso. Muchas veces,el estilo de vida, el ritmo del trabajo hacen que se adopten hábitosperjudiciales. Lo primero que se hace al tomar un paciente hipertenso es tomar medidas higiénico-dietéticas: vemos loque paciente hace mal en su vida y tratamos de ayudarlo a cambiar. Muchaspersonas controlan la hipertensión con este cambio de hábitos. Pero hay algomuy importante: pocas personas logran cambiar de hábitos.
Marcelo García, cardiólogo (MP 26.797 – ME 11.194)socio del Colegio Médico de Río Cuarto
Escucha la entrevista en el micro de Informar Para la Salud en Fm Digital 91.9 realizada el día 9 de abril de 2013: