En los últimos años, la presencia y participación de las mujeres en el desarrollo empresarial y en la creación de nuevos negocios se ha incrementado en forma notoria. Las mujeres a medida que fueron ganando derechos y comenzaron a ser reconocidas socialmente pudieron empezar a desarrollarse como seres autónomos generando mayor número de autoempleos.

Así mismo, no fue fácil para nosotras, las mujeres, dar los primeros pasos fuera del hogar. En sus primeros tiempos comenzamos a salir a trabajar incursionando en la docencia. Pero no en cualquier organización educativa, solo en el nivel primario, para luego continuar ganando terreno en el nivel medio. Y es así, como en la década del 70 comenzamos a participar en otras áreas laborales. De esta manera, la mujer pasa a formar parte del mundo profesional, eligen nuevas carreras como medicina, ingeniería, consideradas típicamente masculinas. Estos fueron los primeros inicios en el mundo laboral fuera de las tareas hogareñas y del cuidado de los niños.

No debemos olvidar que la mujer siempre tuvo una activa y comprometida participación en el desarrollo de la humanidad. La historia cuenta con un sinfín de mujeres talentosas en los campos más diverso. Hoy, casi no queda sitio en que la mujer no pueda trabajar.

En los últimos siglos se produjeron muchos progresos con respecto a la posición de la mujer en el mundo laboral. Pero que significa para las mujeres trabajar activamente fuera del hogar?…Es reconocido por la comunidad académica que el emprendimiento promueve el empoderamiento económico y social de las mujeres. Las expectativas que empiezan a generar sobre sí mismas contribuyen al proponerse metas más elevadas por alcanzar.

Cabe destacar el valor que adquiere en la autoestima y la autoimagen, y porque no las expectativas sobre si mismas para el desarrollo de la propia autoestima. Esto permite proyectarse y alcanzar metas que no se habían propuesto cuando ingresaron al mercado laboral.

Una de las formas de lograr el aumento de las expectativas sobre sí mismas se produce en el aprendizaje de diferentes tareas dentro de las empresas, los negocios o microemprendimientos. También es importante, la captación constante en diferentes tareas, que brinden herramientas y recursos que sean útiles, así mismo la autoconciencia de los objetivos propuestos y el consiguiente logro aumenta favorablemente la mirada que cada una puede tener de sí misma, potenciando la confianza y seguridad en sus capacidades.

Una alta expectativa sobre si misma permite proponerse llegar a objetivos cada vez más elevados en el área laboral pero sobretodo en el área personal.

Cuál es nuestro desafío como mujeres 2.0?…proponernos objetivos laborales pero también personales, que nos llenen de energía y bienestar que contribuyan a un pleno desarrollo.

Una mujer que ha conseguido el equilibrio entre sus ansias maternales y su realización como individuo establecerá una relación más beneficiosa y saludable con sus afectos.

 

María Gisela Constantino

Lic. En Psicología

M.P. 7899


Compartir:


  Categorías:

Sin categoría